Las tecnologías se han vuelto, de alguna manera, enemigas de la familia. Aguascalientes Ags., 29 de mayo.- Conforme se avanza en tec...
Las tecnologías se han vuelto, de alguna manera, enemigas de la familia. |
Aguascalientes Ags., 29 de mayo.- Conforme se avanza en tecnología y las relaciones humanas se tornan más complicadas, la construcción y sostenimiento de familias resulta cada vez más desafiante, sobre todo porque se enfrenta a una serie de factores que limitan el sano desarrollo de las mismas.
Sobre el punto el obispo de la Diócesis de Aguascalientes, José María de la Torre Martín, aseguró que desde siempre se han enfrentado dificultades para que sobresalga el núcleo familiar, pero “hemos de reconocer que asistimos a la presencia de nuevos desafíos como la función educativa, la ansiedad, drogodependencia, violencia familiar y la ideología de género”.
A lo que ya se venía arrastrando externo que ha surgido la ideología llamada “de género”, que niega la diferencia y la reciprocidad natural de hombre y de mujer, cuando “una sociedad sin diferencias de sexo, vacía el fundamento esencial de la familia.
De manera que, ante los retos que se tienen, “nadie puede pensar que debilitar a la familia como sociedad natural fundada en el matrimonio, es algo que favorece a la sociedad”, por el contrario, advirtió que perjudica la maduración de las personas, el cultivo de los valores comunitarios y el desarrollo ético de las ciudades y de los pueblos.
En la actualidad, apuntó De la Torre Martín, ya no se advierte con claridad, dijo, que sólo la unión exclusiva e indisoluble entre un varón y una mujer, cumple con una función social plena.
Es de llamar la atención, comentó, que así como hay una iniciativa legislativa que busca repensar lo relativo al divorcio exprés, hay otra en la que se plantea la posibilidad de renovar el compromiso matrimonial cada seis meses, sin pensar que con esta situación quienes salen más dañados en sus derechos son los hijos y las mujeres en muchos casos, “no piensan que destruir a la familia en nada favorece a la sociedad, insistió.