Catedrática de la Universidad B. Juárez en Calvillo denuncia despido injustificado con tintes de discriminación. 

Aguascalientes Ags.,02 de agosto 2021.- Iliana Martínez Murillo era asistente académica de la Universidad para el Bienestar Benito Juárez García en el municipio de Calvillo, pero fue despedida de forma súbita y sin justificación laboral alguna. Como ella, hay cuando menos 115 maestros y directivos de estas universidades en el país que fueron despedidos de forma injusta, con visos de discriminación ideológica. 

Con 25 años de experiencia en el ámbito educativo, licenciatura, maestría y un doctorado sin concluir, Martínez Murillo, desarrollaba funciones administrativas con el cargo de coordinadora cadémica, exige su reinstalación inmdediata o el pago justo de su liquidación por despido injustificado, además gastos derivados de un accidente laboral que tuvo al interior de la universidad, del que nadie se hizo cargo.

A continuación se transcribe una carta que le dirige a la Coordinadora General de Universidades Benito Juárez Gacía, Raquél de la Luz Sosa Elízaga en la que le pide solución  a su problema: 

Aguascalientes, 1 de agosto de 2021.

DRA. RAQUEL DE LA LUZ SOSA ELÍZAGA

Coordinadora General de las Universidades para el Bienestar

Benito Juárez García

 

Doctora Sosa:

Mi demanda está en curso, y espero que mis compañeros, que al igual que yo, sufrieron su injusto despido, decidan también demandar legalmente. Lo mío no es un golpe bajo, ni una situación ideológica como usted quiere hacer creer a la opinión pública. No soy conservadora; no soy de izquierda; no soy de derecha; soy una mujer y profesionista mexicana agraviada que, habiendo solicitado de usted una reconsideración para evitar quedar en estado de indefensión después de sufrir un accidente laboral dentro de una Universidad del Bienestar, solo recibió una “carta de agradecimiento” a modo de despido y la condición de firmar para recibir el último pago. Eso sí es un golpe bajo, además de ilegal.  Lo mío es defender mis genuinos derechos a conservar mi trabajo. Lo mío, es no tolerar un despido injustificado, sin una causa, sin liquidación, sin más motivo que otra más de sus ocurrencias.

Cito estas palabras suyas, transcritas por mí de una conferencia virtual suya, del día 19 de abril de 2021:

“Las personas formadas en pedagogía, comunicación y psicología están formadas en la formación neoliberal. No necesitamos asistentes académicos pedagogos, ni psicólogos, ni comunicólogos…”

“La libertad de cátedra es una forma de ideologización distinta a la colectividad y la visión socialista”.

Con todo respeto le digo esto: su necedad, su falta de empatía, su despotismo, nos tienen abrumados a todos. Usted no inspira respeto, porque no lo brinda; usted solo genera temor.

Copio a toda la gente que puedo esta carta, porque no quiero que se desvirtúe mi mensaje con información manipuladora y sesgada diciendo que son ataques de la oposición, o de gente que no comulga con su ideología y que intenta desestabilizar al gobierno.

Esta carta tiene que ver más con que los trabajadores de las UBBJ hemos sido víctimas de su despotismo, de sus chantajes, de sus faltas de respeto, de sus actitudes groseras y, sobre todo, de su afán de poner en duda nuestra capacidad y pertinencia profesionales para trabajar, ya sea en la docencia, en la gestión académica, o en la atención a los estudiantes, alegando requerimientos específicos de las carreras, que solo existen en su imaginación.

Hemos sido víctimas de un inmoral condicionamiento para el pago de nuestros salarios, obligándonos a hacer sus tristemente famosos “cuadritos”, forzando las horas dedicadas a la docencia, para acomodarse en un modelo educativo de su invención y que usted llama “caleidoscopio”; haciendo basura los planes y programas de estudio con sus ocurrencias e inventando un pseudo modelo que busca hacer una escuela con el mínimo de recurso humano para ahorrar en la nómina, en menoscabo de la calidad de los egresados

Porque tengo más de 25 años en educación y gestión académica; porque siempre me conduje con profesionalismo y respeto, tanto hacia mis compañeros docentes como hacia los jóvenes estudiantes a quienes serví y aprendí a amar; y porque considero que debo predicar con el ejemplo ante cualquier atropello, como el que ahora usted me infringe; es que he decidido defender mi trabajo, luchar por mi derecho, y no permitir que se pisotee.

He leído su respuesta en el Sol de México, publicada el pasado 29 de julio, en donde usted dice que “no existen despidos masivos… sino que se trata de renovación de convenios cada seis meses”. Entonces la atenta carta en donde se “agradeció mi participación”, diciéndome que “por el momento no están en condiciones de renovar mi convenio de prestación de servicios educativos…, esperan que en un futuro puedan contar nuevamente con mi intervención profesional”; ¿Qué es? ¿A quién quiere engañar usted? Porque en realidad usted dispuso mi despido injustificado, al considerar mi profesión como de “formación neoliberal”.

En congruencia con todo lo aquí expuesto, demando:

1. Se me restituya en mi cargo de Asistente Académica en la sede en donde trabajé, debido a que no incumplí ninguna cláusula del convenio leonino que ustedes nos hacen firmar, Y tengo los conocimientos, la preparación y la experiencia necesaria (25 años en docencia y gestión académica).

2. Restitución de docentes, asistentes académicos(as) y coordinadores(as) académicos(as) que, como yo, fueron despedidos(as) injustamente, después de haber pasado por un riguroso proceso de selección y habiendo sido fundadores(as) algunos(as) de ellos; solo porque usted decidió que nuestras carreras y experiencia profesional, no eran pertinentes.

3. Que se nos contrate en apego a la legislación laboral, incluyendo seguridad social y prestaciones de ley, y se abandone de inmediato el humillante y oprobioso sistema de cuasi outsourcing, basado en convenios leoninos que denigran y precarizan nuestro trabajo. Le recuerdo que nuestro Sr. Presidente, condena esta práctica, más aún, en el caso de quienes trabajamos en la educación.

4. Se me paguen mis gastos médicos, consecuencia del accidente que tuve DENTRO de la sede educativa, y en horario de trabajo y que le fue informado usted y al personal a su cargo en su momento, y del que nunca obtuve respuesta.

5. No se permita la corrupción y la impunidad por malos manejos en la construcción de las sedes, como fue el caso de la sede Calvillo durante 2020, donde se recabaron pruebas contundentes, y que se le hicieron llegar a usted y a la dirección administrativa en su momento (documentales, audios, testimonios, etc.).

México es compromiso de todos, Dra. Sosa; actuemos con congruencia.

 

ILIANA MARTÍNEZ MURILLO

Aguascalientes, México



Cabe destacar que Martínez Murillo inició actividades laborales de febrero de 2020 a julio de 2021, con el cargo de Asistentes Académica, sin impartir clases frente a grupo. El pasado 15 de julio fue despedida sin justificación alguna y ahora demanda solución a su problema.




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