El Estado está obligado a atender la salud de las personas, pero no a mantenerla; hay poca prevención y mucha exigencia de los enfermos....
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| El Estado está obligado a atender la salud de las personas, pero no a mantenerla; hay poca prevención y mucha exigencia de los enfermos. |
Aguascalientes Ags., 20 de julio.- El Estado está obligado a brindar protección a la
salud, pero no a mantener la salud de las personas, esa es un deber que la
mayoría de los individuos ignoran o a la que hacen caso omiso, para luego
saturar los servicios médicos a donde llegan exigiendo se les devuelva al
estado físico óptimo que nunca se preocuparon por mantener.
Así lo planteó en entrevista el titular de la
Comisión Estatal de Arbitraje Médico (Coesamed), Salvador Alonso Sánchez al
referir que la obesidad, dislipidemia, hipertensión y la diabetes mellitus, son
problemas que le cuestan al Estado cantidades impresionantes de dinero y que
pudieron ser, en muchos casos evitadas o al menos controladas antes de que se
presentarán cuadros de gravedad.
“Nada más pensemos –dijo- en lo que deroga el
IMSS para servicios subrogados en favor de pacientes que son sometidos a
diálisis peritoneal por cuestiones de insuficiencia renal crónica”,
padecimiento que frecuentemente se combina con enfermedades crónico
degenerativas como la diabetes.
Comentó que cuando se revisa el historial médico
de estos pacientes, es común descubrir que la persona generalmente se condujo
de manera irresponsable, no llevó una dieta adecuada, no hizo ejercicio, nunca
se cuidó y al final exige al Gobierno le devuelva la salud que nunca se
preocupó por mantener.
Es por eso, señaló que estar a cargo de la
Coesamed, es una tarea difícil porque implica enfrentar muchas aristas que
tiene que ver con la percepción de los implicados en el acto médico, “en el
cual hay dos actores principales, el paciente que es el que requiere la
atención, porque quiere recuperar su salud, y por otro lado el médico que
aplica sus conocimientos para procurar esa recuperación”.
