Son tres semanas de novatadas y apenas llevan una. Son prácticas denigrantes, que violan derechos humanos, con la complacencia de las a...
Aguascalientes
Ags., 27 de agosto.- Ha transcurrido apenas la primera semana de tres, y a pesar
de las denuncias directas y públicas, a través de medios de comunicación,
ninguna autoridad, con excepción de la Fiscalía General del Estado, ha atendido el llamado de auxilio de padres de familia
que experimentan la impotencia ante el “gobierno” que ejercen las “cuarteñas”,
líderes estudiantiles de la normal de Cañada Honda.
La madrugada de
este domingo, para ser precisos, a las 2:00 am, el teléfono de la madre de una
de las internas sonó. Era su hija quien le
llamó, porque hasta esa hora pudo burlar la vigilancia que les tienen todo el
tiempo, sobre las 130 nuevas normalistas. Me llamó solo para desahogarse de las
vejaciones de las que son objeto durante
“la fiesta” (novatada) a las “pelonas”
(las estudiantes de nuevo ingreso).
“Mi marido y yo nos
turnamos en guardias toda la noche, una noche él permanece despierto para
atender la llamada, al día siguiente yo estoy en vela, porque es en la
madrugada que nuestra hija nos puede llamar, como hoy, en la madrugada, que nos
llamó para decirnos que, para evitar que se durmieran, porque no las dejan
dormir, las “cuarteñas” les prepararon
café bien cargado porque les iban a dar doctrina y no deberían dormirse”.
Siguen las novatadas en Cañada Honda y parece a nadie importar. |
“Mi hija no toma
café, entones le obligaron a tomarse una tasa con cuatro cucharadas de café, y
pues se puso mal, a ella sólo le llegó una temblorina, pero a otra de ellas, le
dio taquicardia muy fuerte, y para calmarla, ellas mismas, las “cuarteñas” les
suministraron antidepresivos. De hecho
los antidepresivos se las dieron a muchas que tenían reacciones a la cafeína,
en una situación que ya rebasó los límites, y por lo que las autoridades, tarde o temprano,
tendrán que responder” narró a Noticen, la madre de una de las normalistas y de
quien no se revelará su identidad porque “las tienen amenazadas si revelan lo
que está pasando dentro”.
Dijo que han
acudido a diversas instancias y de todas ellas, nadie les ha hecho caso a su
denuncia, sólo la Fiscalía General, que inició una carpeta de investigación de
la que esperamos haya consecuencias, sin embargo, lo que se necesita en este
momento es una actuación rápida para evitar una desgracia.
La madre de la
interna explicó que acudió a derechos humanos, pero ahí no le quisieron recibir
su queja. “Fuimos atendidos por un tal Joaquín Ordoñez, pero nunca tomó nota de
nada, nos hizo creer que estaba realmente interesado en el caso, pero lo que
pretendía era hacernos desistir de la denuncia”.
“Yo llamé al
diputado Jesús Morquecho, que nos dijeron que era presidente de la comisión de
educación, pero, ¿sabe qué me dijo? Me dijo que difícilmente él podría hacer
algo, porque esas normalistas están muy bien protegidas y nadie se mete con
ellas”, narró su experiencia con el legislador que ve los asuntos de educación
en el Congreso del Estado.
Dijo que también
intentó hablar con el director general del IEA, Raúl Silva Perezchica, de quien
dijeron, estaba muy ocupado, entonces nos canalizaron con un señor de nombre
Sabino Torres Zamora, a quien al momento en que le expusimos el tema motivo de
nuestra llamada, nos interrumpió y nos dijo que él se comunicaría con nosotros,
y todavía seguimos esperando la llamada.
Entrevistada vía
telefónica, hasta la entidad en donde tienen su residencia, ya que viven fuera
del estado de Aguascalientes, la madre de la normalista dijo preocupada que van
a ser tres semanas de la “fiesta” de las
“pelonas” y apenas llevan una, en la que, estudiantes de algunas de las 17
normales rurales hermanas, llegaron hace pocos días, y participaron en el adoctrinamiento.
Dijo que su hija
le narró cómo una noche, reunidas en el comedor, les pasaron la proyección de
unos videos “subversivos” en donde se veían manifestaciones y acciones de represión.
Esto fue en la noche, y que, tras varias horas de que las trajeron corriendo
sin descanso, estaban exhaustas y así les hicieron ver esos videos.
“De forma
sorpresiva, encapuchados comenzaron a golear ventanas y puertas, haciéndolas creer
que lo que sucedía era eral, que estaban siendo atacadas. Los supuestos atacantes rompieron los cristales
de las ventas, y en el descontrol, con los vidrios en el piso, algunas de ellas se
cortaron”.
“Pero lo que fue
el colmo -narró la madre de la normalista- fue que, en la parte exterior del
comedor, les estallaron bombas molotov y las agruparon a todas, ya
amedrentadas, les rociaron de agua, haciéndoles creer que era gasolina, y pues
muchas de ellas si se la creyeron, cayendo en ataques de pánico, porque creían
que serían incineradas”.
Esto fue parte de
la primera semana, y todavía faltan dos.
“Mi hija sigue dentro, porque tiene muchas ganas de superarse, de salir
adelante, yo le digo que abandone la escuela, porque su superación no será a
costa de su salud”, ya que ella padece de una lesión en columna y le dan
dolores muy fuertes, no debe hacer cualquier tipo de esfuerzo y ni eso le ha
valido para que dejen de hostigarla.
Finalmente dijo
que las autoridades están muy a tiempo de actuar, de detener los abusos, porque
ponen en riesgo la salud y la vida de las muchachas. Este domingo por la mañana,
las mandaron a vender gelatinas, y les amenazaron que tendrían que vender
todas, de lo contrario no las dejarían ingresar.
Por cierto que, a
diferencia de años anteriores, en esta ocasión ya no las sacan a la calle a
correr, ahora lo hacen dentro del plantel, para evitar llamar la atención dado que existe
el supuesto compromiso con las autoridades de que este año no habría novatadas,
sin embargo, nada de eso es cierto dado que hay 130 internas de nuevo ingreso
que están siendo hostigadas, vejadas y nadie hace nada. ¿A quién les importa? Después de todo, son sólo
normalistas.