Frenan reforma constitucional provida; no alcanzó la mayoría calificada.
Aguascalientes
Ags., 27 de diciembre.- Con solo 17 votos a favor, cinco en contra y cinco
abstenciones, el dictamen de reforma que buscaba plasmar en la Constitución el
derecho a la vida, fue devuelto a comisiones, en lo que que fue considerado un
triunfo para los grupos minoritarios proaborto.
Al no alcanzar el
mínimo de 18 votos a favor, el dictamen de reformas constitucionales que
pretendía incluir el derecho a la vida desde su concepción y hasta la muerte
natural, regresó a comisiones, poniendo fin a este intento por llevar a la
constitución lo que fue expuesto como el “primer y principal derecho humano”
como lo planteó el panista Gustavo Báez en su intervención a favor del
dictamen.
Durante una
sesión a gritos cruzados entre manifestantes próvida y proaborto, las y los
diputados debatieron a “sordas” debido a que los gritos de los manifestantes,
apagaron las voces, tanto de la presidencia de la mesa directiva, que no dejaba
de llamar al orden, como por momentos, acallando la voz de los propios
legisladores que subieron a tribuna a manifestar su aprobación o rechazo a la
iniciativa.
El primer
diputado que subió a tribuna fue Eder Pedro Guzmán Espejel, de Morena, quien
argumentó su voto en contra debido a que lo plasmado en la iniciativa era un “disparate
jurídico” el pretender reconocer personalidad jurídica a un feto. Propuso abrir
el debate a la académica, a la sociedad civil organizada, y tomarse un par de
meses más para enriquecer la propuesta de cambio constitucional. Advirtió
además el riesgo de que tras su aprobación, se pudiera iniciar un juicio de
inconstitucionalidad.
Enseguida fue el
turno del diputado del PV, Sergio Augusto López Ramírez, quien manifestó
abiertamente su voto a favor, diciendo que su partido es promotor de la vida y
que el embrión “nos guste o no, es un ser con derechos” y citó el 29
constitucional federal para respaldar su dicho, amén de señalar que hay ya 19
estados del país en los que se tiene ya reformada su constitución en los
términos en los que se busca para Aguascalientes. “Que no nos asusten con el
petate de la revisión de la constitucionalidad”.
En medio del griterío,
el diputado Eder pidió el uso de la voz bajo el pretexto de alusiones
personales que habría hecho el legislador verde, sin embargo, su solicitud fue
negada porque no se ajustó a la norma interna del congreso en define las “alusiones
personales”. Sin embargo, el legislador de Morena, se brincó los procedimientos
y tomó el micrófono en varias ocasiones, desde su curul y de plano, subió a
tribuna aun sin la autorización de la diputada presidenta, Paloma Amézquita, lo
que seguramente le derivará en alguna sanción, algo de lo que no se expuso en
ese momento.
El siguiente
legislador en debatir fue Cuauhtémoc Cardona Campos, de Morena, quien en un
intento por darle gusto a todos, argumentó a favor y en contra de la
iniciativa. Dijo respetar la forma de pensar de cada quien, sin generar
argumentos sólidos para el debate. Sin embargo votó en contra, por lo menos ese
fue el sentido de su intervención en tribuna.
Luego le siguió
el diputado Alejandro Serrano Almanza, del PAN, quien disertó un amplio tratado
científico tratando de convencer a los legisladores de que desde la concepción
hay vida y derechos que cuidar. Su argumentación solo fue escuchada por pocos,
dado que los gritos de los manifestantes impidieron un proceso legislativo
adecuado.
Después subió el
perredista Jorge Saucedo, quien planteó que el votar a favor del dictamen, es
una regresión en conquistas de derechos de las personas. Argumentó además los
graves riesgos que implican el dejar sin protección, a merced de abortos
clandestinos que solo arriesgan la vida de las mujeres por iniciativas como la
presentada que criminalizan a la mujer.
El ultimo
legislador en debatir fue Gustavo Báez, coordinador de los diputados del PAN,
quien llamó a sus pares a legislar con responsabilidad; a hablar e informar
correctamente del contenido de la iniciativa, porque se ha manipulado su
contenido y pareciera que el debate y la votación girara en torno a la
penalización del aborto, cuando lo único que busca es incluir el derecho fundamental
primero, por excelencia, que es el derecho a la vida.
Una vez concluido
el debate, se procedió a la votación, pero antes, el legislador Gustavo Báez,
solicitó a la mesa directiva que el voto fuera por cédula, es decir, voto
secreto, moción que fue apoyada por la mayoría de los legisladores, incluidos
los del PRI, quienes, a pesar de su activismo previo con ONG´s, no tomaron la
palabra para pronunciarse a favor o en contra. Simplemente no fue su tema y no
le entraron.
La votación quedó
con 17 a favor, 5 en contra y 5 abstenciones, lo que no fue suficiente para dar
por aprobada la reforma constitucional en cuestión.
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