En Aguascalientes, los expendios de gasolina operan
al 50%; reconoce Pemex problemas en el abasto.
Aguascalientes Ags., 5 de
enero.- Mientras que en entidades como Puebla, Querétaro, Estado de México,
Jalisco, Guanajuato, Michoacán, Hidalgo, el desabasto de combustibles es
prácticamente generalizado, en Aguascalientes se opera al 50% de la capacidad
de distribución, mientras que Pemex reconoció problemas en el suministro de
gasolinas y diésel.
Mediante un
comunicado emitido por Petróleos Mexicanos,
informó que “como parte del Plan Conjunto del Gobierno de la República
para combatir el robo de combustibles, se ha privilegiado el uso de medios de
transporte más seguros, lo que implica cambios en la logística de entrega a las
estaciones de servicio. Esto ha ocasionado retraso, afectando mayormente a los
estados de Hidalgo, Estado de México, Jalisco, Michoacán, Guanajuato y
Querétaro”.
“Cabe recalcar
que no se enfrenta escasez de producto ni especulación de precios; nuestras
Terminales de Almacenamiento y Despacho cuentan con suficiente inventario para
cubrir la demanda de la población”.
“Pemex está
haciendo su mayor esfuerzo para incrementar hasta en un 20 por ciento más su
distribución en los estados afectados, todo ello mediante auto-tanques y
carro-tanques, para cumplir con el abasto oportuno y suficiente a nuestros
distribuidores y consumidores”.
Asimismo, se hace
un exhorto a los usuarios para que “eviten compras extraordinarias de gasolina,
ya que el abastecimiento se normalizará a la brevedad”.
“Pemex apela a la
comprensión y apoyo de la sociedad, pues con estas medidas la empresa busca
evitar pérdidas económicas por el llamado “huachicoleo” o robo de hidrocarburo,
acciones que se traducirán en beneficios para todos los mexicanos”.
Aguascalientes opera al 50% de su capacidad de
distribución de gasolinas.
Aunque Pemex no
menciona a Aguascalientes como una entidad afectada por el desabasto de
combustible, la falta de gasolina alcanzó ya al 50% de las estaciones de servicio.
En un recorrido
que realizó Noticen por diversas
estaciones de gasolina, se pudo constatar que si bien, la mayoría de los
expendios cuentan con combustible, solo la mitad de las mangueras está en
funcionamiento en tanto que los dependientes aseguran que Pemex les está surtiendo
solo la mitad de lo que habitualmente dejan para la venta.
Propietarios de franquicias
de Pemex confirmaron que la escasez de combustible les está afectando ya en sus
ventas desde el pasado viernes, debido a que Pemex dejó de usar los ductos y
toda la gasolina la está transportando en pipas, lo que está haciendo más lento
el abasto de Magna, Premium y Diésel.
“Lo que nos
preocupa es que el lunes se reactiva la movilidad al 100% en la entidad, esto
es, que la demanda de gasolina se incrementará a partir de este domingo, y
Pemex no está garantizando regularizar el abasto de manera inmediata” dijo un
propietario de una gasolinera consultado por este medio de comunicación.
El problema es estacional y se agrava con el
cambio de gestión en Pemex.
Mientras tanto,
un especialista en el tema energético consideró que el problema de desabasto
por el que atraviesa algunas regiones del país es derivado de dos factores: el
incremento del consumo de gasolinas en Estados Unidos, que reduce su capacidad
para surtir a México y por el otro, la ineficiencia de Pemex para adquirir
combustibles rápidamente debido a que muchos ejecutivos con habilidad y
experiencia en compras, ya no están en Pemex por los cambios en el gobierno
federal.
“Hay muchos
ejecutivos talentosos, con experiencia y habilidad en compras internacionales
que ya no están en Pemex, y eso dificulta mucho sortear el desabasto que cada
fin de año se genera, lo que retrasa considerablemente la distribución de
gasolina”.
Recordó que el
70% de la gasolina que se consume en el país es importada, lo que, combinado
con la reducida capacidad de almacenamiento de combustibles, vuelve al país muy
vulnerable en el tema energético.
La norma
internacional indica que un país deberá tener la capacidad de almacenamiento de
su consumo continuo por al menos 15 días. En México la infraestructura que
tiene le da solo para tres días, lo que explica que con relativa frecuencia
haya escasez de combustibles.
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