MANDO MILITAR: ¿PARA QUÉ TANTO BRINCO
ESTANDO EL PISO TAN PAREJO?

Por Mtro. en C. Sadi Kuri
10 de abril 2019


Hace unas semanas se debatió en las cámaras el reformar el artículo 21º Constitucional con la finalidad de darle vida a la Guardia Nacional. La aportación de la Sociedad Organizada fue medular para que nuestros legisladores y legisladoras comprendieran que la Policía debe de estar en manos de civiles. Aún y cuando al Presidente no le gustó el democrático contrapeso del legislativo; “apechugó”. Todo parecía indicar que después de tanto debate se lograba conciliar a todos los actores y se determinó que la Guardia Nacional sería una institución civil.

Esta historia dio un vuelco de 180º hace unas horas, cuanto el Presidente, en sus ya muy desgastadas conferencias de prensa, informó que ya tenía al titular de la Guardia Nacional. Se trataba de un militar en activo y posteriormente daría a conocer su nombre.

Nuevamente el Presidente ignora lo que el “pueblo sabio” y el Poder Legislativo concluyeron: una Guardia Nacional de carácter meramente civil. Como bien dijo Jesús Reyes Heroles; “La forma es fondo”. Pareciera necedad del Presidente el querer militarizar la seguridad pública del país. En los últimos 12 años el Gobierno federal militarizó meta jurídicamente a las policías del país y los resultados los estamos viviendo. Ha quedado firmemente demostrado que las entidades federativas en donde se despliega al Ejercito sufren un espiral ascendiente de violencia; Guanajuato, Michoacán, Sinaloa, etc.

Otro aspecto que deja entrever la actitud caprichosa del Presidente es que un militar en activo no puede formar parte de instituciones civiles. Deberá de pedir licencia para poder tomar la titularidad de la Guardia Nacional ¿Para qué hacer un anuncio de tales dimisiones cuando (espero que así sea) sabe que primero deberá de pedir licencia? Quizás porque resulta más rentable anunciar que el titular es un militar en activo que uno con licencia. La forma es fondo.

La milicia tiene una formación específica, en caso de ser necesario, usan la fuerza letal para cumplir sus órdenes. Una vez dada la orden no se puede ni debe negociar una salida alterna. Si el mando ordena que por esa puerta no pasa nadie, nadie debe pasar y quien ose ir en contra de las ordenes sufrirá las consecuencias. En un estricto sentido esto no es malo. Sin embargo, si lo trasladamos al día a día de la seguridad pública resulta peligroso.

Me parece que se está tratando de desviar la atención de la realidad del país. Hemos tenido el trimestre más violento y con más muertes en la historia del México posrevolucionario. A más de cien días de gobierno federal siguen si poderse ver cuáles son las políticas públicas en materia de seguridad pública. Más allá del; si yo soy honesto, todos serán honestos, no se les ven ni pies ni manos a las estrategias del gobierno federal en materia de seguridad pública.

¿Para qué tanto brinco estando el piso tan parejo? Después de un verdadero ejercicio democrático participativo, de ese que tanto lo gusta al Presidente, en el que la Sociedad Organizada y Académicos entraron a las entrañas de la cámaras y en voz de Alejandro Madrazo dieron verdaderas cátedras para contestar la pregunta de ¿porqué no una policía militarizada? y la legislatura federal en ejercicio de sus funciones concluyó lo que la lógica, el sentido común, la academia y el “pueblo sabio”, a través de los y las expertas sugería; una Guardia Nacional de carácter meramente civil.

Primero el desorientado Secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (que alguien le avise que ya comenzó el sexenio por favor) quien inmediatamente después de que las reformas para dar vida a la Guardia Nacional fueron votadas a través de un Twitter dijo: “Celebramos el consenso logrado en Cámara de Senadores para crear la Guardia Nacional, entidad imprescindible para garantizar una seguridad adecuada en nuestro País. Se tratará de un cuerpo policial de excelencia con adscripción civil y formación homologada a la militar.”, ¿formación homologada a la militar? ¿en verdad no entendió lo que se votó? Y después el Presidente anuncia que la Guardia Nacional estará a cago de un Militar en activo, quien tendrá que pedir licencia para asumir. La forma es fondo.

El Presidente desde un principio quería una Guardia Nacional militarizada, al cabo de tanta vuelta obtuvo lo que quería.

¿Para qué tanto brinco estando el piso tan parejo?

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