Pide Obispo a fieles no desfallecer ante la inseguridad y la injusticia.

  Ante el acoso y acusaciones injustas, la inseguridad y la violencia, de la indiferencia de los fieles, el llamado a los ministros de la...

 

Ante el acoso y acusaciones injustas, la inseguridad y la violencia, de la indiferencia de los fieles, el llamado a los ministros de la Iglesia católica es a no claudicar ni caer en la tentación del desánimo, expresó el obispo de la Diócesis de Aguascalientes, José María de la Torre Martín.

Aguascalientes Ags., 15 de agosto. Ante el acoso y acusaciones injustas, la inseguridad y la violencia, de la indiferencia de los fieles, el llamado a los ministros de la Iglesia católica es a no claudicar ni caer en la tentación del desánimo, expresó el obispo de la Diócesis de Aguascalientes, José María de la Torre Martín.

Durante la homilía de la misa pontifical encabezada por él, en donde se contó con la asistencia de todo el presbiterio de esta Diócesis, así como del obispo emérito de Tehuantepec, Arturo Lona Reyes y el arzobispo emérito de Durango, Héctor González Martínez, De la Torre Martín, manifestó que son muchas las dificultades nuevas a las que se enfrentan los sacerdotes.

Se vive en un entorno de inseguridad y violencia, de corrupción e impunidad, de indiferencia religiosa de parte de los fieles católicos y de la incongruencia de otros tantos, “distintos indicadores de fracasos pastorales que hemos podido constatar en las últimas evaluaciones”.

Recalcó que más de uno se han visto acusados injustamente de delitos electorales y son perseguidos persistentemente por la Fiscalía Especial Para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE), e incluso han tenido que ampararse para garantizar la legalidad de todos los procesos jurídicos que tendrán que enfrentar todavía.

Ante estos hechos, subrayó: “estamos con ustedes, tengan la absoluta seguridad, como afirmó San Agustín, que la verdad padece, mas no perece, sino más bien permanece y prevalece”.

Así pues, el Pastor de la Diócesis, reiteró la recomendación “para que no se apague en ustedes la sana inquietud que les mantiene en camino, no desatiendan la oración, cuiden su vida interior, permanezcan disponibles cada día para formarse y dejarse sostener y enseñar porla vida pastoral y por el pueblo de Dios”.